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Bien, la miel es un súper alimento –lo sabemos, es una gran medicina –también lo conocemos, y se encontraron tarros de miel en las tumbas de los faraones y era aún comestible –sí, lo sabemos también. Pero, ¿Por qué la fechas de caducidad papa?
Como Rector de la Universidad del Alto Conocimiento Apícola, cada día más Irreverente, y cada día más Contumaz, os digo; no temáis de vuestra ignorancia que para eso estamos aquí todos, estamos para aprender… ¡Carajos!
Ya lo dije que la miel “bronca”, la miel natural, tiene muchas ventajas y propiedades, pero la miel comercial, o sea, la miel que se vende en los supermercados, es solo una composición de azucares que en un momento fue miel, y que debido a razones y procesos comerciales, ha dejado de ser miel para convertirse en un endulzante más, de tantos que existen en las dulcerías. Nuestra miel debería de venderse más bien en las farmacias o en las Catedrales, como elixir medicinal, o de perdida como un regalo de Dios a los hombres – ¡y mujeres también!… Con eso de que estamos en un momento histórico donde las mujeres reclaman lo que siempre han tenido, y exigen una postura que no deberían de tener, puesto que lo que les hemos ofrecido es el primer lugar en todo y para todo, y ahora, quieren sobajarse del pedestal y trono, para convertirse en peón y tener los mismos derechos de ser el proveedor y machetero familiar. –tan mal ustedes mis chamacas. En fin, la miel del supermercado no es súper-miel, ni súper alimento, ni súper remedio medicinal.
En USA existen 30 o más productores y empacadores de mieles cuyo destino es las grandes tiendas de alimentos, y en esas mieles, no se ha encontrado ningún rastro de pólen. Entre la falta de pólen, también faltan vitaminas, enzimas y otra gama de componentes naturales en la miel que, debido a la pasteurización y procesos, han sido removidos para evitar la cristalización de la miel en los anaqueles. La mayoría de las mieles “doradas” de los supermercados, son materia muerta, sin propiedades alimenticias o curativas, y de consumirse, solo estarán consumiendo endulzante con algo de sabor a miel. Estos consumidores son ingeridos por la glotonería comercial de los traficantes alimenticios, que sin escrúpulos, fabrican sin afán de alimentar y solo por ganancias deshonestas. La FDA, agencia de USA que regula los alimentos, dice que si una miel es ultra filtrada y no tiene pólen, ya no es miel. Pero, como en México, la FDA tiene leyes que son bonitas en los libros, y como en México; las leyes solo existen para los más jodidos. En México se vende una enorme cantidad de basura que se vende como miel, y usurpa los mercados que nos pertenecen a los apicultores y por ellos, el consumidor enferma al consumir lo que ellos buscan como alimento y medicina.
La ultra filtrada, es un proceso de alta tecnología que ha sido refinado y que es invención de los chinos. Los chinos, al ser vetados de los mercados por producir mieles contaminadas de diferentes compuestos químicos, se sacaron esas técnicas que, elimina todo tipo de pólen y componentes que pueden ayudar a identificar el origen de la miel, por los compuestos o rastros de pólen que estas presentan. Los acopiadores que están comprando en efectivo, sin recibos y sin algún documento que diga a donde va esa miel, de seguro están comprando miel real, para mezclarla a los adulteradores de miel. La cosa funciona así; se elabora una mescla con fructosa a la que le agregan químicos para imitar color y sabor, le agregan invertasa para desdoblar los azucares, y le agregan una pequeña parte de miel para que esta miel, aporte el pólen y otros compuestos que permiten identificar un líquido, como miel.
En USA, se ha encontrado mucha miel contaminada de antibióticos y metales pesados, de procedencia China e Hindú, que sin rastros de pólen, es imposible rastrear sus orígenes. Los chinos, durante su carrera por el dominio del mercado de la miel, subsidiaron la industria apícola china fuertemente. La intención era definitivamente eliminar mercados emergentes y establecidos que, por la competencia ilegal, tendrían que desaparecer. Simplemente se propusieron a través de una práctica ilegal de “dumping”, infiltrar mieles adulteradas y de muy bajo costo, a los mercados internacionales. Fue tanto su voraz apetito por el dominio de los mercados internacionales, que terminaron sin una industria apícola limpia que pudiera producir miel real o pura, y ahora si quieren consumir miel real; la tienen que importar.
USA y los mercados europeos intentando proteger su industria apícola, impusieron tarifas arancelarias a la miel china, pero los chinos en lugar de pasar por las puertas normales, a través de esquemas comerciales corruptos, evadieron las puertas normales y se sospecha que utilizando otras naciones, han hecho un “lavado de miel” para llegar a estos mercados. A los grandes procesadores de miel, miel destinada para los supermercados, poco les interesa la calidad y menos el valor alimenticio y medicinal de la miel, y como la miel china tiene un valor adquirido por subsidios, suele ser tan barata, que les deja enormes ganancias a los buitres apícolas de esta enredadera comercial del comercio de la miel.
La pasterización y procesos de la miel para que llegue a los supermercados, y asumiendo que es miel real, son agresivamente destructivos para los componentes que hacen de la miel, un alimento y medicina. La miel bronca, contiene pequeñas cantidades de propóleo y resinas similares a los que se encuentran en los propóleos. Los propóleos son una compleja mescla de resinas, secreciones de las abejas, y otras substancias que las abejas utilizan para sanear y sellar las colmenas, es un tipo de cemento para cerrar entradas a parásitos y enfermedades, es utilizado como un barniz para limpiar y sanear las celdas donde se deposita la miel o larva, y mantiene la colmena libre de bacterias y microorganismos que sin la existencia del propóleo, simplemente las abejas no pudieran combatir. El propóleo es parte integrada de la sanidad de la colmena, es parte del sistema inmunológico y parte integral de la sanidad e higiene de las abejas. El propóleo tiene Phitonutrientes, que son nutrientes o químicos que aparecen naturalmente en plantas y que ayudan a combatir naturalmente gérmenes, microbios, hongos, insectos y otros enemigos de las abejas. Entre estas substancias, se pueden encontrar las que tienen propiedades que combaten el cáncer y los tumores entre muchas otras enfermedades más.
En el momento de procesar la miel, se pierden todas estas propiedades de estos delicados compuestos químicos que naturalmente ocurren en las mieles.
Las mieles broncas contienen bacterias benévolas para el humano que son resistentes a la acides de la miel. La presencia de lactobacilos que, aportan beneficios a las abejas y humanos, no fueron encontrados en el aparato digestivo de las abejas durante el invierno y que fueron alimentadas solo con jarabe de azúcar, indicando que no es precisamente el alimentar con fructosa o jarabe de azúcar lo que mata las abejas, sino la falta de los beneficios de consumir miel durante las épocas sin entrada de néctar. La miel regula la cantidad de azúcar que el hígado procesa, y mantiene un nivel de glucosa óptimo para el metabolismo durante el sueño y ejercicio. La miel es un combustible ideal para el cuerpo porque contiene un 50% de glucosa y 50% de fructosa más o menos porque la fructosa en cantidades propias y balanceadas, activan enzimas del núcleo de las células del hígado que son necesarias para la incorporación de la glucosa en glicógeno. La presencia del glicógeno en nuestro organismo, garantiza una provisión exacta y continua al cerebro durante nuestro sueño y durante etapas de alta actividad. Cuando la presencia del glicógeno es adecuada y suficiente, el cerebro puede agregar adrenalina y cortisol al sistema, para convertir la proteína almacenada en los músculos, en glucosas y aumentar el rendimiento del individuo. Al faltar el glicógeno en nuestro sistema, con el paso del tiempo nuestro metabolismo sufre un deterioro donde la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y la obesidad prosperan.
Estos beneficios y muchísimos más de la miel real, esta miel deja de ser miel de alimento y medicamento, para ser desplazada por una mescla dulce a la que la industria y agencias gubernamentales le llaman miel…
Ese producto si tiene una fecha de caducidad, puesto que no es más que un endulzante más de los mercados baratos y corrientes que abastecen lo que más les reditúan y más aporta a su voraz economía.